A esa hora en que los pasillos de un hospital suenan más a nevera que a vida, los fluorescentes del…
La noche había caído sobre la carretera de terracería como una manta húmeda. Un viento tibio arrastraba polvo y aroma…
Me llamo Hilda Guadalupe Morales y escribo estas líneas a mis setenta y tres años, con una taza de té…
La marcha del órgano subía como una ola y retrocedía como un suspiro de piedra. La Catedral Metropolitana, con su…
Desde que Clara faltó, la mansión de los Del Valle parecía un museo abierto solo para el polvo. Había arte…
La tarde tenía la apatía tibia de las ciudades pequeñas: un viento que barría la plaza con la indiferencia de…
El rumor del avión parecía una cuna con alas. Un zumbido uniforme, caliente, que se pegaba a los párpados como…
El restaurante Las Pérgolas brillaba como una joya en medio de Polanco. Desde la calle, el mármol rosado de sus…
La primera vez que la vio, Eduardo Santana —hijo del legendario Fabián Santana, el magnate que había levantado un emporio…
El viento del mediodía levantaba remolinos breves sobre la tierra roja, como si el desierto practicara sus suspiros. Un auto…
A Gabriel Herrera le habían repetido toda la vida que el tiempo es oro. Desde joven aprendió a convertir minutos…
“¡Apaga los aparatos, tu hija va a salir del coma!” El grito atravesó la habitación como una piedra lanzada a…
El aire de la sala de juntas estaba tan inmóvil que cualquiera habría jurado que también tenía miedo. Al fondo,…
Las puertas de madera de la iglesia de San John se abrieron con un gemido antiguo, y la luz de…
Habían apostado que Lis Duarte no aparecería. A esas horas, decían, estaría encerrada en su apartamento de Ipanema, con las…
Diego Santa María aprendió, mucho antes de saber atarse las agujetas, que el silencio podía tener peso. De niño lo…
La mañana olía a cloro y a cobre viejo en el sótano de la Clínica Santa Teresa. El zumbido de…
El área de maternidad estaba abarrotada aquel día. En un hospital de referencia en medio de la Ciudad de México,…
Doña Carmen se sentó en una vieja silla de mimbre, con sus manos delgadas aferradas al borde y la mirada…
Tengo 20 años y soy peluquero, sin nada especial en mi vida hasta que ella entró. Ella se llama Hằng,…