La noche del homenaje a Rubby Pérez en el Maunaloa estuvo llena de emociones, música y memoria.

El evento fue organizado por su hija Zulinka, quien decidió rendir tributo al legado de su padre de la manera más genuina: sobre un escenario.

VER EL VIDEO DE LA ENTRADA DE MIGUEL ESPOSO DE ZULINKA AL FINAL DEL CONTENIDO

Acompañada por su esposo Miguel Báez, Zulinka presentó el show “Un canto de amor y memoria”, que reunió a los músicos que durante años acompañaron a Rubby.

Miguel Báez no solo asistió como apoyo emocional, sino que sorprendió al asumir un papel protagónico en el espectáculo.

Desde el inicio, se integró al homenaje con gran respeto y energía, demostrando su compromiso tanto con la memoria del artista.

Como con el proyecto musical que ahora comparte con su esposa. Su presencia fue recibida con cariño por el público, que lo aplaudió desde su primera interpretación.

Durante la noche, Miguel interpretó varios temas, incluyendo canciones cristianas que conectaron profundamente con la audiencia.

Entre ellas destacó un mensaje de gratitud a Dios, con el que quiso recordar la importancia de mantener la fe incluso en medio del dolor.

Con su estilo y entrega, logró transmitir un mensaje de consuelo sin perder la esencia alegre del merengue.

Zulinka, por su parte, emocionó al público al cantar temas icónicos de su padre como “De color de rosa”.

Canción que no pudo interpretar el día del accidente en el Jet Set por motivos de salud.

Con lágrimas y voz firme, dedicó cada palabra a su padre, recordando que esa canción fue la última que él interpretó en vida. El momento conmovió a todos los presentes.

AQUI EL VIDEO DE LA ENTRADA DE MIGUEL

La noche del homenaje a Rubby Pérez en el Maunaloa estuvo llena de emociones, música y memoria.

El evento fue organizado por su hija Zulinka, quien decidió rendir tributo al legado de su padre de la manera más genuina: sobre un escenario.

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Acompañada por su esposo Miguel Báez, Zulinka presentó el show “Un canto de amor y memoria”, que reunió a los músicos que durante años acompañaron a Rubby.

Miguel Báez no solo asistió como apoyo emocional, sino que sorprendió al asumir un papel protagónico en el espectáculo.

Desde el inicio, se integró al homenaje con gran respeto y energía, demostrando su compromiso tanto con la memoria del artista.

Como con el proyecto musical que ahora comparte con su esposa. Su presencia fue recibida con cariño por el público, que lo aplaudió desde su primera interpretación.

Durante la noche, Miguel interpretó varios temas, incluyendo canciones cristianas que conectaron profundamente con la audiencia.

Entre ellas destacó un mensaje de gratitud a Dios, con el que quiso recordar la importancia de mantener la fe incluso en medio del dolor.

Con su estilo y entrega, logró transmitir un mensaje de consuelo sin perder la esencia alegre del merengue.

Zulinka, por su parte, emocionó al público al cantar temas icónicos de su padre como “De color de rosa”.

Canción que no pudo interpretar el día del accidente en el Jet Set por motivos de salud.

Con lágrimas y voz firme, dedicó cada palabra a su padre, recordando que esa canción fue la última que él interpretó en vida. El momento conmovió a todos los presentes.

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